“La IGP Chistorra de Navarra se estableció a mediados del año pasado. Actualmente la formamos 16 productores y este año se han certificado bajo este sello 1.200.000kg”, afirma Alberto Sarnago, director de Embutidos Hortanco, una de las empresas pertenecientes a la IGP.
“Es un sello de calidad que te distingue del resto de productores”, explica, “y este era el objetivo que queríamos conseguir, que se nos distinguiera como un producto arraigado en Navarra y muy consumido a nivel local y nacional”.
Origen de la IGP Chistorra de Navarra
Hace más de dos décadas hubo un intento de acuerdo entre los productores, pero finalmente no llegó a su fin por diferentes factores y la IGP no pudo formarse. “Pero en el año 2019, se retomó el tema y conseguimos un acuerdo entre fabricantes pequeños y grandes con el fin de dar al cliente una confianza a nivel nacional e internacional y una calidad standarizada”, explica Sarnago.
Características de la chistorra
La IGP de Chistorra de Navarra ha protagonizado diferentes actos promocionales dentro del Salón Gourmets, en los que se ha dado a conocer al público profesional sus características y sabor exclusivo, además de los tipos de producto que hay. “Dentro de la IGP hay dos tipos de fabricación”, explican. “La forma más tradicional, la que realiza el carnicero de toda la vida, que no lleva ningún aditivo, ni colorante, ni conservante y se embute en tripa natural y presenta un distintivo verde”.
El otro tipo, es de color negro y rojo, y “se puede hacer con tripa de colágeno y añadirle algún aditivo básico, que es el tipo que suele producirse desde las empresas industriales, y lo que ha hecho que estos también se unan a la IGP”. Lo que sí es común a todos son los ingredientes básicos: “carne de cerdo, pimentón, ajo y sal”.
Creciendo en exportación
“Nuestro principal mercado es nacional, pero estamos creciendo en exportación, sobre todo en Europa y ya trabajamos en países como Bélgica, Suecia y Francia, a nivel empresa”, confirman desde Embutidos Hortanco, “por temas burocráticos aún no la podemos comercializar con el sello IGP, pero la idea es hacerlo en cuanto se pueda”.
En el sector son conscientes de que, “es un producto que está muy de moda y queremos aprovechar el tirón y el auge de la demanda”.
