En Europa, se están produciendo cambios notables en las cadenas de suministro de carne de cerdo debido a una serie de factores que incluyen nuevas regulaciones, la constante evolución del entorno comercial y la transformación de los patrones de consumo, según queda reflejado en un estudio de Rabobank.
Concretamente en los Países Bajos, mercado en el que se ha focalizado este informe, estos elementos que están afectando a Europa en general, están ejerciendo una presión significativa en el país neerlandés, que presenta además sus propios desafíos locales.
Un factor clave que afecta a la industria porcina en este país es la presión ejercida por la política nacional en relación con las emisiones de nitrógeno. Las autoridades locales han intensificado su enfoque en la reducción de las emisiones de nitrógeno en un esfuerzo por abordar preocupaciones ambientales y de salud. Esta política ambiental más estricta plantea desafíos adicionales para los productores de carne de cerdo en el país, que deben adaptarse a las regulaciones más rigurosas y buscar prácticas más sostenibles.
Un sector que tiende a reducirse
Además, el mercado neerlandés también se ve influenciado por las tendencias y condiciones del mercado que están sucediendo por el resto de Europa. Estas influencias, combinadas con las regulaciones locales, pueden llevar a una disminución en el tamaño de su industria porcina de aquí a 2030.
Además, Europa se enfrenta a un desafío importante en términos de su competitividad en los mercados globales debido a la implementación de estándares de producción más altos. Esta situación tiene implicaciones significativas para los Países Bajos, ya que son altamente dependientes del comercio internacional.
La necesidad de mantener y mejorar la competitividad en este entorno globalizado es una preocupación fundamental para el sector porcino holandés, que se encuentra en una posición vulnerable debido a su dependencia de las exportaciones.
Apoyo en la innovación
De hecho, la restauración de la rentabilidad en toda la cadena de suministro de carne de cerdo es ahora mismo una prioridad crítica para evitar una caída irreversible en la industria porcina de este país.
Por otro lado, es importante destacar que la tecnología y la innovación desempeñarán un papel fundamental en la consecución de los objetivos tanto sociales como ambientales. Esto incluye la adopción de prácticas sostenibles y la búsqueda de soluciones innovadoras que cumplan con los estándares medioambientales cada vez más exigentes y que se alineen con los objetivos sociales de una producción responsable.
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