El conglomerado alimentario de origen mexicano Sigma, propietario, entre otras, de Campofrío y Navidul, ha presentado su balance de resultados referentes al año 2022, que reflejan la obtención de unos ingresos de 7.425 millones de dólares, lo que supone un incremento del 9 % con respecto a los resultados del año anterior, cuando se obtuvieron 6.817 millones de euros.
Sus operaciones se encuentran distribuidas en cuatro mercados principales: México, Europa, Estados Unidos y Latam por este orden de peso en su facturación. Todas ellas han crecido entre un 15 y un 18 % con respecto al año anterior a excepción de Europa, que se ha contraído un 6 %.
Estos datos negativos en el viejo continente se deben, en gran parte, por el incremento en costes de energía, la depreciación de las monedas locales, así como una menor contribución del negocio de carne fresca.
En lo que respecta al flujo anual, en 2022 ha sido de 652 millones de dólares, lo que supone una reducción del 12 % con respecto a 2021. Esto se debe al impacto mayor al esperado en los resultados europeos, que contrarrestan con los desempeños positivos del resto de regiones.
Rodrigo Fernández, director general de Sigma, ha comentado al respecto de estos resultados que “2022 fue un año en el que capitalizamos nuestras capacidades y nos adaptamos a presiones inflacionarias sin precedente”.
Ha añadido además que “los ingresos aumentaron un 9 % soportados por una demanda resiliente. Esta cifra récord estuvo por encima de nuestra guía. No obstante, el flujo estuvo por debajo debido a la fuerte inflación en Europa. Nos motiva el positivo desempeño de las Américas y la perspectiva de las acciones decisivas en curso para hacer frente a las extraordinarias circunstancias en Europa”.
