Equalia, organización no lucrativa dedicada a mejorar las condiciones de vida de los animales destinados a consumo, ha hecho público un reportaje en el que denuncia graves irregularidades en bienestar animal en dos granjas españolas que están relacionadas con proveedores de carne de pollo de Lidl.
Las granjas en cuestión se encuentran, una en Sevilla, concretamente en el municipio de Villamanrique de la Condesa, y otra en la localidad tarraconense de Roquetas. Además, según apunta la ONG, ambas cuentan con el certificado en Bienestar Animal Welfair de AENOR.
El vídeo, publicado este martes por Equalia, contiene imágenes del interior de una de las granjas, grabadas entre 2022 y 2021 por un trabajador infiltrado. Advertimos que las imágenes pueden herir la sensibilidad del espectador.
Tal y como relata Julia Elizalde, coordinadora de campañas en Equalia, en la granja de Sevilla, situada en Villamanrique de la Condesa, se ve a los operarios que “realizan la descarga de pollitos en la explotación arrojándolos al suelo bruscamente”. Unas prácticas, denuncian, que “contraponen el bienestar animal y pueden provocarles la rotura del pico, extremidades, esternón, huesos o incluso la muerte”. La granja en cuestión, que cuenta con casi 100.000 aves por ciclo repartidas en tres naves, estaría, según la ONG, integrada en el Grupo Sada.
Ante ello, la ONG ha denunciado al propietario de la granja sevillana y al productor avícola por presuntos delitos de maltrato animal y contra la salud pública.
Por su otro lado, en la granja de Roquetas, compuesta por dos naves, prosigue Julia Elizalde, “se observa un contenedor roto con pollos en descomposición y larvas expuestos al aire”. Esta explotación, según señala la ONG, estaría integrada en Padesa.
Desde Equalia, lamentan que “las granjas que aparecen en este reportaje de investigación estén certificadas con el sello Welfair de Bienestar Animal y al mismo tiempo críen pollos broiler de crecimiento rápido”. Para la ONG es “esencial favorecer la transparencia más allá de los certificados ya existentes para asegurar que se comparte la información adecuada con los actores sociales -incluidas las personas consumidoras- en las prácticas de bienestar animal”.
En este sentido, explica Julia Elizalde, “Equalia ha iniciado, junto a otras organizaciones europeas, la campaña hacia Lidl, ‘Lidl escándalo animal’, para poner fin al sufrimiento innecesario de los pollos de engorde y que la cadena suscriba el Compromiso Europeo del Pollo, un acuerdo al que se han adherido más de 300 empresas en Europa y que incluye la sustitución de razas de crecimiento rápido -como las que se observan en el reportaje- por razas de crecimiento más lento y natural. Lidl es uno de los pocos grandes supermercados en España que no se ha unido”.
Lidl condena rotundamente estas malas prácticas
El área Cárnica de C de Comunicación se ha puesto en contacto con Lidl para conocer su postura ante los hechos que denuncian desde Equalia.
Desde la cadena de supermercados condenan “rotundamente los abusos y el maltrato animal que se muestran en las imágenes difundidas. El vídeo mostrado es inaceptable y manifestamos nuestro completo rechazo ante ese tipo de prácticas”.
Lidl, prosigue, “tiene un firme compromiso con el bienestar animal y por ello ya hemos contactado con nuestros proveedores para averiguar si realmente esas imágenes se han grabado en una de sus fábricas o granjas. En caso de que así se demuestre, Lidl exigirá a su proveedor que deje de trabajar automáticamente con dicha granja, tal y como se especifica en su política de compras responsable, de obligado cumplimiento para todos sus proveedores. En cualquier caso, a día de hoy no nos consta ninguna denuncia ni a ninguno de nuestros proveedores ni a ninguna de las granjas con las que colaboran”.
“En Lidl venimos impulsando desde hace años distintos proyectos pioneros en materia de bienestar animal. A día de hoy el 100 % de la carne fresca, los huevos frescos y la leche que vendemos en nuestras tiendas en España, además de ser origen nacional, cuentan con el sello de ‘Bienestar Animal’, siendo el primer supermercado en España en obtener dicha certificación para sus marcas propias. Esta certificación está basada en los estándares europeos de Welfair Quality, y garantiza una buena alimentación, buena salud, buen alojamiento y el comportamiento apropiado del animal. En definitiva, el bienestar animal en todos los ámbitos de su vida, incidiendo en aspectos como su estado emocional o la ausencia de dolor”, asegura la cadena de supermercados.
“De la mano de nuestros proveedores, trabajamos permanentemente a lo largo de toda la cadena de suministro para seguir proponiendo objetivos ambiciosos y realistas en favor del bienestar animal e implementamos aquellas medidas nacionales e internacionales que sean factibles para todos nuestros colaboradores y que satisfagan las necesidades y demandas de nuestros clientes. En este sentido, apoyamos todas las iniciativas en favor del bienestar de los animales, incluidos los objetivos que defiende el Compromiso Europeo del Pollo -que compartimos y en los que ya estamos trabajando-, si bien, solo nos podemos comprometer con aquellas medidas que tengamos la seguridad de poder cumplir de manera realista tanto en la forma como en los plazos en cada uno de los mercados. En cualquier caso, y después de que las conversaciones lamentablemente quedaran interrumpidas de forma unilateral por parte de los representantes internacionales del Compromiso Europeo del Pollo en 2021, el grupo Lidl se encuentra actualmente en contacto con ellos para continuar el diálogo”, concluye la compañía.
¿Y qué tiene que decir AENOR en esto?
En Cárnica también nos hemos puesto en contacto con AENOR, ya que según denuncia Equalia, las granjas anteriormente citadas cuentan con el sello Welfair de esta entidad certificadora.
Tal y como nos indican desde AENOR van a iniciar “un procedimiento de investigación en las instalaciones certificadas por esta entidad en los citados municipios para contrastar los hechos denunciados. Este procedimiento se realizará en coordinación con el IRTA, propietario del referencial contra el que certifica AENOR en Bienestar Animal. En función de los resultados se aplicarían las medidas sancionadoras que procedan, conforme al Reglamento correspondiente, las cuales podrían desembocar en la retirada del certificado de constatarse incumplimientos graves”.
Tras una revisión de los expedientes en vigor, AENOR nos confirma que entre las explotaciones en activo de cría de pollos radicadas en Villamanrique de la Condesa y en Roquetes, cuatro están certificadas en Bienestar Animal por ellos.
Por último, AENOR ha querido aclarar que realizan certificados en bienestar animal a explotaciones de diferentes especies desde 2014, “habiendo sido los pioneros en esta certificación, que ha contribuido a extender buenas prácticas en bienestar animal en toda España. Actualmente, más de 15.000 granjas están certificadas en Bienestar Animal por AENOR. Los auditores de AENOR acumulan una larga experiencia y especialización, contándose entre ellos numerosos veterinarios y veterinarias. Las certificaciones se emiten con una validez de tres años, con auditorías anuales de seguimiento”, concluyen.
Este medio también ha querido conocer la opinión de AVIANZA al respecto, aunque la Interprofesional ha declinado dar ninguna declaración ya que el tema lo están tratando de manera interna.
Asimismo también hemos contactado con el IRTA, entidad encargada de desarrollar el esquema de certificación en Bienestar Animal Welfair. Desde el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias nos dijeron ayer que por la tarde se iban a reunir internamente para tratar este asunto, aunque esta mañana todavía no nos han trasladado ninguna declaración al respecto.