Con motivo de las inspecciones que el Servicio de Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil de Navarra realiza en establecimientos de la Comunidad Foral, se han intervenido en un almacén de Pamplona 130 kg de productos cárnicos que carecían de medidas higiénicas y sanitarias para su correcta conservación.
Además de observaron que se realizaba la carga y descarga de paquetes que contenían productos alimenticios sin las correctas medidas higiénico-sanitarias necesarias para su correcta conservación, los agentes también comprobaron cómo se cocinaban alimentos sin las medidas higiénicas pertinentes, con el riesgo que ello puede suponer para la salud de los consumidores.
Asimismo, los agentes de la UDAIFF (Unidad de Análisis e Investigación de Fiscal y Fronteras) también pudieron constatar cómo en el interior de este almacén se estaba realizando actividad de transporte de paquetería sin tener la licencia para ello.
Tras detectar todas estas irregularidades, la Guardia Civil informó al Servicio de Inspección de Sanidad del Ayuntamiento de Pamplona, quien certificó que los productos cárnicos no podían ser puestos a la venta al público, por lo que fueron retirados para su posterior destrucción.
En total se han formulado 9 actas de denuncia, por incumplimientos al Real Decreto de Impuestos Especiales, por ejercer una actividad sin estar dado de alta, por vender productos desconociendo su origen, por almacenarlos en lugares inadecuados, y por la conservación inadecuada de alimentos ultracongelados.
Las multas de las denuncias por incumplimiento del Real Decreto 1165/95 de Impuestos Especiales, oscilan entre 600 a 30.000 euros. Y de las demás actas de denuncia que se formularon a otros Reales Decretos y Decreto Foral, sus multas oscilan entre 150 y 6.000 euros, además de la posibilidad del cierre del establecimiento.
