La Guardia Civil, en colaboración con la Dirección General de Salud Pública del Govern de Illes Balears, ha investigado a cinco personas (tres hombres y una mujer) como presuntos autores de un delito contra la salud pública por la elaboración y comercialización de alimentos cárnicos en mal estado. La investigación se enmarca en la Operación ‘Exspiratum’.
231 kg de productos inmovilizados
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), junto con técnicos de Salud Pública, realizaron una inspección en una empresa distribuidora de alimentos ubicada en Palma de Mallorca. Durante la actuación se localizaron 231 kg de productos no seguros, entre ellos alimentos cárnicos elaborados con materia prima caducada.
Según la información proporcionada, el procedimiento consistía en cortar las partes externas deterioradas y descontaminar la carne con lejía, para enmascarar el deterioro microbiológico y organoléptico. A continuación, personal administrativo modificaba los números de lote para extender la vida útil de los productos elaborados.
La Guardia Civil advierte de que el uso de alimentos caducados para elaborar productos cárnicos representa un riesgo grave e inminente para la salud de los consumidores.
Por ello, subraya la importancia de respetar estrictamente las fechas de caducidad en todos los procesos de la cadena alimentaria.