Rabobank ha publicado el tercer informe del año sobre el sector avícola y en el que señala que las perspectivas para la industria avícola mundial en el cuarto trimestre de 2022 y principios de 2023 siguen siendo optimistas, a pesar de los grandes desafíos, presentes en toda la avicultura mundial, así como algunos reveses recientes en América del Norte.
Desde la perspectiva del mercado, Rabobank vaticina que un clima económico más débil con presión sobre el poder adquisitivo conducirá a un comportamiento del consumidor más orientado al precio, lo que beneficia el consumo de carne de aves de corral, ya que es la opción de proteína cárnica más barata.
Asimismo, desde la entidad bancaria señalan que el comportamiento del mercado dependerá también de la dependencia de la economía local del comercio de energía. En general, el sur/sudeste de Asia, Oriente Medio y África tenderán a obtener mejores resultados que Europa, el noreste de Asia y Norteamérica.
Asimismo, apuntan que los riesgos de Covid-19 siguen presentes y podrían provocar nuevas perturbaciones en la temporada de invierno del hemisferio norte e indirectamente en el comercio internacional.
Los mayores retos del sector
En este último informe, Rabobank apunta que los mayores retos operativos son los actuales precios elevados de los piensos; el aumento de los precios de la energía en los países dependientes de las importaciones; los elevados costes de distribución; el aumento de los costes laborales; y la actual preocupación por la gripe aviar.
Rabobank espera que los precios de los piensos se sitúen en torno a los niveles del primer trimestre durante el resto de 2022 y principios de 2023, lo que supone un 10 %-15 % por debajo del nivel máximo del segundo trimestre.
La importante inflación de los precios de coste entre otros insumos, indica el informe de Rafobank, significa que hay un margen limitado para bajar los precios del pollo. Este es especialmente el caso de Europa, donde los precios futuros de la energía para el invierno están alcanzando niveles hasta 10 veces superiores a la media. Esto podría afectar a la cría y a la transformación, con el aumento de los costes, la preocupación por la disponibilidad de CO2 para el aturdimiento y el aumento de los costes de almacenamiento y distribución del frío.
Escasez de oferta ante la gripe aviar
Otra amenaza para el sector, señala Rabobank, es la gripe aviar, que sigue extendiéndose por todo el mundo, con casos continuos en el hemisferio norte, incluso en verano, y en el sudeste asiático y África. El riesgo continuo de propagación y la mayor dificultad para el comercio de productos de cría provocan una situación de escasez de suministro en muchas regiones.
Rabobank señala que la escasa oferta mundial y la inflación de los precios han llevado a un volumen comercial récord de 3,5 millones de toneladas métricas en el segundo trimestre de 2022, y esperan que en el segundo semestre de 2022 el comercio sea aún más fuerte. También constatan que más países están abriendo los mercados a las importaciones para frenar la inflación de los precios locales.
En este contexto de mercado global tan desafiante, Rabobank indica que será importante mantener el equilibrio de la producción. En América del Norte y México, donde la oferta ha aumentado, se sugiere el riesgo de perder el equilibrio del mercado en estos tiempos de inflación de los precios de coste. Y ponen a Brasil como otro ejemplo.
Rabobank sugiere que la industria avícola mundial debe centrarse en la excelencia de las operaciones. Ser eficiente en tiempos de inflación, grandes retos de suministro e interrupciones marca la diferencia entre un buen y un mal rendimiento. Asimismo, apunta, también es importante ofrecer soluciones adecuadas y asequibles para mantener el pollo en el menú de los consumidores que están bajando de precio.
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