El Consejo de Estado de Francia validó de urgencia el pasado 27 de julio la petición de la asociación Protéines France, que defiende a los fabricantes del sector de las proteínas vegetales, de suspender el decreto que iba a prohibir, a partir del 1 de octubre, usar denominaciones cárnicas en productos elaborados a base de protecínas vegetales, tal y como informan varios medios franceses.
Con la suspensión de este decreto, largamente exigido por las asociaciones interprofesionales de la carne y la ganadería del país vecino, la jurisdicción administrativa francesa sigue la posición europea, que autoriza el uso de términos de origen animal, excepto para los productos a base de leche.
La organización Protéines France presentó el viernes pasado una suspensión provisional del decreto del gobierno del 29 de junio, alegando que no les daba suficiente tiempo para reorganizar sus actividades.
