19 países solicitaron el lunes a la Comisión Europea que estudie la activación de medidas de mercado excepcionales para el sector porcino en virtud del Reglamento sobre la Organización Común de Mercados. La petición oficial la realizó Bélgica el pasado lunes en la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura, con un documento firmado y apoyado por otros 18 Estados miembros entre los que no figura España: Austria, Bulgaria, Croacia, Chipre, República Checa, Estonia, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Polonia, Rumanía y Eslovaquia.
El documento presentado por Bélgica se titula ‘Crisis en el sector de la carne de cerdo’ y ya en su primera frase enmarca la situación al señalar que: La situación de la industria de la carne de cerdo en Europa es crítica.
A partir de ahí, explica (apoyándose en la gráfica que reproducimos tras este párrafo) que los márgenes del sector de la carne de porcino en la UE se encuentran desde hace un año en su punto más bajo de la última década. Por un lado, los precios europeos de las canales de cerdo son actualmente incluso un 7,2 % menores que el año pasado, cuando los precios ya eran muy bajos debido a los brotes regionales de peste porcina africana y a las interrupciones de la cadena de suministro y del consumo de COVID-19. Por otra parte, los costes de producción de la carne de cerdo, especialmente el precio de los piensos, están experimentando los niveles más altos de los últimos 8 años.
Según señala el documento belga, los precios de la carne de cerdo han sido bajos en varios Estados miembros debido a múltiples factores.
- La producción en toda la UE aumentó, mientras que el consumo se ha visto alterado por el impacto del COVID-19 en el consumo fuera de casa.
- También se debe a la caída de la demanda china. Las exportaciones a China han disminuido, la cuota de mercado está de mercado está siendo ocupada por otras regiones productoras y la producción porcina china se está expandiendo.
- Algunos países orientados a la exportación y que tienen o han tenido casos de PPA, como Bélgica y Alemania, no pueden exportar carne de cerdo a muchos destinos asiáticos, especialmente a China. Esto añade presión no sólo en el mercado nacional, sino también en el mercado interior europeo. Los precios son bajos, especialmente para los que todavía sufren embargos comerciales y los que son economías de escala. Incluso Bélgica, reconocida oficialmente por la OIE como libre de PPA desde finales del año pasado año pasado, no puede exportar a China ni siente el efecto de los embargos comerciales de Alemania y Polonia, ya que una parte de sus canales se despiezan en estos países.
- Los productores de los Estados miembros más pequeños están sufriendo la sobresaturación del mercado interior de la UE de la carne de cerdo, en particular, los países que llevan mucho tiempo con restricciones relacionadas con la PPA desde los primeros brotes en 2014, se ven muy afectados, ya que su capacidad para regular oferta en el mercado interno es limitada debido a las escasas posibilidades comerciales.
Además, los precios de los piensos han alcanzado su nivel más alto desde hace aproximadamente una década, debido a los impactos climáticos globales y una mayor demanda de China.
En opinión de los 19 países que apoyan esta petición, esta peligrosa combinación de precios bajos y costes de producción elevados está afectando a la industria de la carne de cerdo. Por ello, solicitan que se analice la posibilidad de tomar medidas que ayuden al sector.
España no figura entre los 19 países que piden a Europa medidas excepcionales para el sector porcino por la sencilla razón que que tenemos nuestra política comercial.
Europa nos deja en banda pero españa seguira con su politica de mercado y volveremos a exportar a los paises asiàtics a la medida que se estava haciendo hasta ahora.