Las vitaminas B12 y B6 de la carne contribuyen a mejorar la concentración en el trabajo, entre otros múltiples beneficios que aportan. Esta es una de las conclusiones que se han destacado desde la plataforma Carne y Salud en las III Jornadas de la Alimentación Saludable en el Lugar de Trabajo, organizadas por la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, la Escuela Nacional de Medicina de Trabajo, la Fundación Alimentación Saludable y la Universidad Complutense de Madrid.
Por ello, una alimentación sana y equilibrada es clave para mantener un adecuado estado de salud, lo que va a repercutir en el rendimiento profesional. Una adecuada alimentación puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad que en ocasiones se crea en el entorno laboral, además de ayudar a un mejor rendimiento en el puesto de trabajo.
En este sentido, tomar durante el almuerzo un tentempié elaborado con jamón, o durante las comidas incluir carne y productos cárnicos como ternera, cordero, cerdo o conejo nos van a aportar proteínas de alto valor biológico, con aminoácidos esenciales como el triptófano, que es clave para evitar el estrés, porque contribuye a aumentar la síntesis de serotonina, un neurotransmisor implicado en los estados de ánimo y cuyo déficit está relacionado con la depresión.
Además, la carne aporta numerosos nutrientes que van a contribuir en el ámbito laboral a concentrarnos más, estar más atentos, evitar la fatiga o tener un mayor rendimiento, siempre dentro de una dieta sana y equilibrada y un estilo de vida activo.
Dentro de esta alimentación saludable, el aporte de proteínas, vitaminas y minerales es fundamental. La carne aporta estos nutrientes, ayudando a cubrir las necesidades de estos y por consiguiente su papel es fundamental en la alimentación en el entorno laboral, junto a los demás grupos de alimentos y cantidades recomendadas por los expertos en nutrición, y a un estilo de vida activo.
