Este martes día 19 de noviembre se ha celebrado en el emblemático edificio ‘El Sucre’ en Vic, la jornada ‘El fraude alimentario: diferentes puntos de vista y retos de futuro para el sector’, organizada por FECIC y a la que han acudido 30 empresas del sector.
Una jornada didáctica, práctica pero sobre todo en la que se aportó una visión diferente del tema del fraude, desde un punto de vista tan necesario como es el de la comunicación. Cárnica estuvo presente e incidió en la importancia de la comunicación para mejorar la reputación social del sector.
La mesa redonda estuvo formada por representantes de diferentes empresas e instituciones de las partes interesadas e implicadas en este tema como son: las instituciones públicas, los fabricantes y distribuidores, los consumidores, las empresas y los medios de comunicación.
Ponentes de toda la cadena de valor
Como hemos adelantado, el fraude alimentario es un tema que no solo despierta interés entre las empresas si no en el que intervienen los eslabones antes mencionados.
Entre los participantes en la mesa se encontraban: Núria Rey Huerga, responsable de Coordinació d’Actuacions Contra el Frau, de la DG d’Alimentació, Qualitat i Gastronomia del Departament d’Agricultura, Ramaderia i Pesca; Xavier Pera Baldomà, responsable de seguridad alimentaria y calidad de AECOC; Carme Sabater Sánchez, presidenta en CUS, Salut, Consum i Alimentació y vocal en CECU (Federación de Consumidores y Usuarios); Jordi Montaña Cabacés, director de comunicación de Grupo Vall Companys y la directora de Cárnica, Míriam Pérez Mena. Fue moderada por Ignasi Pons, secretario general de FECIC.
El equipo, el mayor prescriptor de la empresa
Desde Cárnica, como representación de los medios de comunicación, se puso el foco en la importancia de trabajar en la comunicación más allá de los periodos de crisis como puede ser un caso de fraude. “Cada empleado tiene que tener nociones de comunicación, estar al día de lo que sucede a su alrededor y conocer cuales son las políticas de comunicación de su empresa, para estar preparado ante estas situaciones”.
Se hizo un llamamiento a trabajar en la reputación propia y del sector cárnico en general, para empezar a comunicar las acciones que se están llevando a cabo en materias de seguridad alimentaria, igualdad y/o sosteniblidad. Y de esta manera hacer atractivo un sector falto de mano de obra y que necesita atraer talento y retenerlo para su continuidad.