Casademont pretende cambiar su tendencia y que la cifra de ventas que tiene fuera de
nuestras fronteras supere, en 2014 a las que realiza en le mercado interior.
Así, mientras que en 2013 las
exportaciones representaron el 45 por 100 de las ventas de la compañía (con un
crecimiento del 36 por 100 con respecto a 2012), se pretende que en 2014
superen el 55 por 100. Según manifiestan desde la compañía, este cambio también
significará relegar la producción para marcas blancas que representan en la
actualidad un 30 por 100 de las ventas.
Asimismo, Casademont también ha
disminuido el tamaño de su cartera de clientes para centrarse en aquellos que
le son más rentables, lo que acompañado con inversiones por valor de 3 millones
de euros y con un ahorro de costes de 7 millones han servido para transformar
la empresa. Así, en los últimos años se ha invertido en maquinaria, se ha
reorganizado y reestructurado la plantilla y ahora, apuestan decididamente por
reorientar su apuesta mercantil en la que se centrarán en los fuets y las gamas
bajo en sal y sin alérgenos.
