Tras los resultados negativos de 2020 provocados por la pandemia y el cierre del canal Horeca, Cárnicas Serrano ha logrado recuperarse cerrando un 2021 con de 59,4 millones de euros de facturación, 805.000 euros de beneficio y una plantilla media de 275 trabajadores.
Esta recuperación, señala Carlos Serrano, director general de Cárnicas Serrano, ha sido posible “gracias a la reducción paulatina de las restricciones y a un intenso trabajo interno dirigido a la mejora continua, hemos sido capaces de resistir los elevados incrementos en el coste de la energía, sufridos durante la última etapa del año, y de repetir una cifra de negocio que casi alcanza los 60 millones de euros”.
Para este año, prosigue Carlos Serrano, la compañía afronta un 2022 “difícil” marcado por el aumento del precio de la carne de cerdo y pavo; los costes energéticos; y el transporte y los envases, aunque por el contrario, apunta, “también es cierto que hemos recuperado la libertad de circular, de consumir, de recibir turistas y de seguir en la búsqueda de nuevos mercados”.