La IGP Ternera Gallega hace un llamamiento para que, a todos los niveles y desde todos los ámbitos (administraciones, sindicatos, asociaciones, cooperativas, operadores, etc.), se busquen soluciones que permitan mantener y potenciar el sector del vacuno gallego, una actividad vital para Galicia basada en una calidad reconocida en todos los mercados y con un modelo de producción completamente respetuoso con el entorno y con el bienestar animal.
Las producciones que se encuentran bajo el paraguas de la IGP gallega se encuentran en una situación muy crítica que incluso pone en duda su viabilidad de cara al futuro. Esto resulta extremadamente grave puesto que es un sector clave y fundamental para mantener la vida rural gallega, para contribuir a la vertebración de su territorio y para mantener en buen estado los campos evitando la propagación de los incendios.
Las ganaderías de carne de calidad están principalmente en zonas de montaña y media montaña, que son las zonas que más sufren la despoblación. La sociedad tiene que ser consciente y darle valor a la importancia que tienen este tipo de producciones ganaderas para generar alimentos frescos, de calidad y de gran valor nutricional, que se producen respetando el bienestar animal y las demandas de los consumidores.
Los productores de carne de vacuno se encuentran en este momento muy cansados con los ataques indiscriminados que reciben constantemente y, sobre todo, con el actual precio de la carne, que no llega a cubrir los incrementos que se han producido en los costes de producción. Esta situación es dramática porque pone en serio riesgo su continuidad.
En este momento resulta necesaria una mayor implicación por parte de la sociedad y, sobre todo, por parte de las administraciones de la Unión Europea y de los propios países y regiones que la conforman con el sector. No pueden seguir dando una de cal y otra de arena continuamente ni seguir usando diferentes varas de medir.
Las grandes consecuencias de las subidas de precios las están asumiendo los productores ya que así se evita la subida de precios a los consumidores para que no se reduzca el consumo, pero esta situación es insostenible y hay que atajarla de inmediato.
