Makro ha certificado un total de 64 referencias de ternera y añojo con la certificación internacional Global GAP en toda la cadena de producción de su carne de vacuno: desde el pienso vegetal certificado que come el animal, el bienestar y el control veterinario de la granja, el matadero y sala de despiece, hasta la sala de corte y envasado.
Todas estas fases disponen del sello de Ganadería Certificada (GGN) de Global GAP, lo cual supone un proceso de desarrollo e implantación de una certificación de sostenibilidad y trazabilidad del producto, bienestar animal y control sanitario, entre otros aspectos de la cadena de suministro.
“El compromiso de Makro con la producción y desarrollo sostenible es un pilar clave de nuestra estrategia. Mediante esta certificación, ponemos de manifiesto nuestra intención por continuar construyendo y dando pasos en este sentido, garantizando la calidad y el cuidado del entorno en toda la cadena de suministro”, indica Marta Pérez Postigo, directora de comunicación y RSC de Makro.
Estas carnes certificadas por Global GAP, que además se producen 100 % en granjas nacionales, se comercializan bajo sus marcas propias Makro Chef (carne de añojo) y Makro Premium (carne de ternera), con diferentes tipos de corte (lomo alto, lomo bajo, solomillo, aguja, babilla…) pensados especialmente para el hostelero. Se pueden encontrar en tres formatos: las piezas completas al vacío, producto porcionado envasado en termoformado o en bandejas.
Además de la certificación Global GAP, la planta de procesado de estas carnes, dispone de otros dos certificados (IFS y BRC), los cuales garantizan la seguridad alimentaria en todos sus procesos de corte y envasado. Asimismo, laboratorios independientes controlan de manera regular la calidad y el estado de este surtido.