La industria cárnica tiene un gran potencial de ahorro energético, y, caminando de la mano de Empresas de Servicios Energéticos (ESEs), puede mejorar su competitividad empresarial logrando reducir sus costes energéticos y sus emisiones de CO2.
Así quedó patente durante el encuentro sobre ‘Sostenibilidad y eficiencia energética en la industria cárnica’, un evento organizado conjuntamente por ANICE y la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Energéticos (ANESE) y en el que se analizaron vías y soluciones para llevar la sostenibilidad y la eficiencia energética al sector cárnico.
Para Alberto Jiménez, presidente de ANICE, “la industria cárnica es consciente de que tiene un importante reto a la hora de ayudar a mejorar la calidad medioambiental de la economía, logrando reducir sus consumos y facturas energéticas y consiguiendo ser eficientes implementando planes de ahorro energético y estrategias de Responsabilidad Social Corporativa”. Y por ello, reconoció que “es importante que las empresas de la industria cárnica caminen de la mano de los expertos de ANESE”.
Por su parte, Luis Cabrera, presidente de ANESE, a su vez, resaltó el importante marco actual en lo que se refiere a sostenibilidad, haciendo mención a las directrices de la Unión Europea para los próximos 10 años y que contemplan una reducción del 25 % de las emisiones de CO2, porcentaje donde el sector cárnico tiene mucho que aportar.
La jornada estuvo moderada por Carlos Ballesteros, director de ANESE, y Sergio Martín, responsable técnico de ANICE. Durante el encuentro varias empresas de ANESE presentaron sus proyectos de eficiencia energética y de servicios energéticos llevados a cabo en el ámbito de la industria cárnica, así como en el conjunto de la industria alimentaria, destacando las tecnologías usadas, características de contratos, tipos de financiación y los ahorros logrados.