Incarlopsa ha incorporado seis nuevas certificaciones a sus plantas de producción en 2020. Con la renovación de las acreditaciones que ya poseía e incluyendo esta media docena de nuevas certificaciones, la compañía castellano manchega ya dispone de 70 certificados en materia de bienestar animal, compromiso medioambiental, y calidad y seguridad alimentaria en sus once centros de producción ubicados en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Comunidad Valenciana y Andalucía.
Así, en materia de seguridad alimentaria, Incarlopsa cuenta con los dos certificados internacionales referentes en este ámbito: la Global Standard for Food Safety (BRC), una norma de certificación desarrollada en Reino Unido; y la International Food Standard (IFS), norma promovida por la asociación de distribuidores de Alemania, Francia e Italia.
Entre otros aspectos, ambas normas velan por el cumplimiento de los requisitos de un sistema APPCC (Análisis de Peligros y de Control Crítico) y exigen un sistema de gestión de calidad documentado, el control de las condiciones ambientales de las instalaciones, procesos, personal y productos, así como el compromiso de la Alta Dirección de las empresas del sector alimentario que deseen contar con ambas certificaciones en relación a su responsabilidad en la gestión de estos procesos.
Ampliación de la certificación de bienestar animal
El compromiso de Incarlopsa con el bienestar animal es firme. Por este motivo, en 2020 ha ampliado la certificación del matadero de Tarancón en esta materia. A la acreditación Bienestar Animal Welfair de AENOR, basada en los referenciales Welfare Quality y Awin, añade ahora la certificación de la instalación según el Reglamento Técnico de Bienestar Animal y Bioseguridad INTERPORC Animal Welfare Spain (IAWS).
La obtención de esta certificación es totalmente voluntaria y quién quiera optar a él debe someterse a una exhaustiva auditoría que contempla el cumplimiento de este reglamento que ha sido revisado por un comité científico independiente y por asociaciones de protección de los animales.
El Reglamento Técnico de Bienestar Animal y Bioseguridad INTERPORC Animal Welfare Spain (IAWS) vela por el cumplimiento de los cinco principios de bienestar animal establecidos por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE): animales libres de hambre, sed y desnutrición; libres de miedos y angustias; libres de incomodidades físicas o térmicas; libres de dolor, lesiones o enfermedades; y libres para expresar las pautas propias de comportamiento.
Seis certificados de calidad
En materia de calidad, Incarlopsa cuenta con hasta seis certificaciones diferentes aplicables a los diferentes tipos de producto y a las instalaciones donde se producen. Así, cuenta con la certificación Especialidad Tradicional Garantizada (ETG) Jamón Serrano.
También dispone del certificado SAE (Sistema de Autocontrol Específico) con el que se asegura el cumplimiento del Real Decreto 993/2014, que establece los requisitos de la certificación veterinaria oficial para la exportación y que es indispensable para optar a la exportación a terceros países. Cada centro productivo debe contar con su propia acreditación, por lo que en 2020 Incarlopsa ha acreditado según el certificado SAE a los secaderos de Jabugo y de Tarancón.
En línea con este compromiso con la calidad, todos los centros productivos del grupo están acreditados según la norma del ibérico, que garantiza el cumplimiento del Real Decreto 4/2014 de enero de 2014 y es indispensable para poder etiquetar los productos bajo esta denominación protegida.
Además, los centros ubicados en el municipio onubense de Jabugo están certificados bajo la Denominación de Origen Protegida (DOP) de conformidad con el Reglamento Nº 1151/2012 del Parlamento Europeo y del Consejo de la Unión Europea.
Asimismo, la fábrica de productos elaborados situada en Tarancón está acreditada con el sello V-label, un símbolo reconocido internacionalmente para el etiquetado de productos y servicios veganos y vegetarianos, como respuesta a la demanda social de este tipo de productos.
Compromiso medioambiental
Los centros de producción de Incarlopsa están certificados según la norma de Sistemas de Gestión Ambiental (SGA) ISO 14.001, acreditando el compromiso medioambiental del grupo, y ha gestionado y obtenido la certificación para el nuevo secadero de Tarancón. Además, por segundo año consecutivo, en 2020 la compañía ha acreditado su huella de carbono siguiendo las directrices de la norma UNE-EN ISO 14064-1:2012.
Por otro lado, en materia de sostenibilidad, en 2020 Incarlopsa también ha obtenido la acreditación de producción ecológica para el matadero de Tarancón y el secadero de Corral de Almaguer. Este modelo de producción es un sistema de gestión agrícola y producción de alimentos que combina las mejores prácticas en materia de medio ambiente y clima, un elevado nivel de biodiversidad, la conservación de los recursos naturales y la aplicación de normas exigentes sobre bienestar animal y producción, según el Reglamento 848/2018 del Parlamento Europeo y del Consejo de la Unión Europea.