La Comisión Europea ha decidido exigir a todos los Estados miembro que se efectúen pruebas de ADN en los productos elaborados con carne de vacuno. La propuesta de la Comisión se decidirá a lo largo de hoy, 15 de febrero, en un Comité Permanente de la Cadena Alimentaria.
Según la propuesta estos exámenes de ADN se realizarán a partir de 1 de marzo y los primeros resultados se publicarán el 15 de abril. Además, las pruebas se realizarán de forma aleatoria en los productos que contengan carne de res, durante dos o tres meses, ya sean estos fabricados en la UE o importados de otros lugares. Por otro lado se realizarán dos tipos de test de ADN, primero para certificar que la carne es de vacuno y el segundo para descartar contaminación con fenilbutazona en la carne de caballo. Según fuentes comunitarias, en España se llevarán a cabo unas 200 pruebas en cada caso.
Asimismo, se está planteando crear un nuevo sistema de intercambio de información para que la información sobre las pruebas actuales se comparta de forma inmediata. Esto permitirá a otros Estados miembros actuar de inmediato si tienen alguna sospecha.
Se acordó también que las recomendaciones de la Comisión Europea sobre el etiquetado del origen de todas las carnes procesadas deben ser publicados tan pronto como sea posible.
La finalidad de esto es permitir que los consumidores tengan más certeza sobre donde proviene la carne que consumen.