Carpisa Foods ha renovado las certificaciones IFS Food y BRC Global Standards con la calificación High Level, gracias a sus buenas prácticas en seguridad alimentaria. Estas normas internacionales, de gran prestigio en la industria de la alimentación, tienen como objetivo garantizar el nivel máximo de legalidad, calidad y seguridad alimentaria en los procesos de producción y gestión de los productos auditados que elabora Carpisa Foods (carne picada, hamburguesas y preparados cárnicos). En esta ocasión, la compañía ha obtenido el Grado A (Higiene Elevada) en la norma BRC y una puntuación de 98.14% (High Level) en la certificación IFS.
“La renovación de estas certificaciones es el mejor reconocimiento al trabajo que todos los empleados realizamos cada día y al compromiso del equipo directivo por asegurar la correcta gestión de todos los procesos que forman parte de nuestra actividad empresarial”, ha asegurado Marino Bravo, director de Calidad de Carpisa Foods.
Con estas renovaciones, Carpisa Foods constata un año más sus más altos niveles de calidad e higiene y demuestra su apuesta por la mejora continua de los productos que pone a disposición de sus clientes.
Compromiso con la calidad
La garantía de calidad en la producción cárnica es el eje de la política de empresa de Carpisa Foods. Para ello, la compañía cuenta con un departamento de Calidad compuesto por 17 personas y un laboratorio propio totalmente automatizado con la más alta tecnología. Todos los productos son sometidos a una doble auditoría mediante inspecciones internas y externas a través de laboratorios especializados e independientes.
Al mes se realizan más de 2.700 analíticas, tanto de materia prima como de producto final, por lo que Carpisa Foods proporciona la total garantía de que sus productos cumplen con las máximas expectativas de calidad, higiene y seguridad alimentaria.
