El gobierno francés ha detectado un nuevo foco de gripe aviar en Ori, en la región de los Pirineos Atlánticos, el departamento que hace frontera con Gipuzkoa y Navarra. Se trata de una cepa H5N2 “altamente patógena”, según el Gobierno francés, que se ha detectado en una granja de 1.280 patos. Con ésta, ya son 12 las granjas de patos de esta región en la que se han encontrado patos con focos del virus y 69 las granjas afectadas en ocho departamentos del suroeste francés desde el origen del foco a finales de noviembre.
Las medidas adoptadas por el momento son el cierre preventivo de varias granjas de ocas y patos, mientras que el ministerio de Agricultura galos sigue descartando el sacrificio masivo de aves.
Así, con el fin de sanear el entorno, lo que se ha decretado es un procedimiento de vacío sanitario a partir del 18 de enero. Los criaderos de ocas y patos afectados se verán obligados a bloquear su producción durante varios meses para erradicar la enfermedad, además de no poder recibir nuevas crías durante varios meses.
La medida, que se adopta en Francia por primera vez, afecta principalmente a los productores de foie gras (Francia es el primer productor mundial). De este modo, los patos y ocas que están actualmente en los criaderos para la producción de foie sí podrán ser sacrificados para la producción, pero después deberán bloquear la producción y no podrán recibir crías para que puedan desarrollarse labores de limpieza, desinfección y vacío sanitario preventivo.