Una delegación de ASAJA, encabezada por su presidente, Pedro Barato, ha viajado hasta el Vaticano para reunirse con el papa Francisco. El objetivo, trasladar al pontífice su desacuerdo ante las declaraciones que realizó el pasado mes de julio durante la Conferencia Europea de la Juventud, celebrada en Praga, y en las que recomendaba a los jóvenes consumir menos carne para así contribuir a la salvación del medio ambiente.
Tras estas declaraciones, explica ASAJA a la redacción de Cárnica, “nosotros dirigimos una carta al Vaticano diciendo que representábamos a una organización de agricultores y ganaderos y que no considerábamos que la ganadería sea la culpable de todos los males del medio ambiente. Y, a raíz de eso, nos concedieron la audiencia”. En la carta, además de trasladar su queja, la organización agraria se presentaba a viajar hasta el vaticano para explicarle al Santo Padre el por qué de su queja, “y raíz de eso fue cuando nos concedieron la audiencia”.
La audiencia habían sido asignada para el 5 de enero, pero justo coincidió con el funeral del papa emérito Benedicto XVI, por lo que, les adelantaron la visita al día 4, coincidiendo con la audiencia general de los miércoles, “con lo cual el tiempo se redujo notablemente y poco más allá de un saludo, no dio demasiado de si”.
Aún así, la delegación de ASAJA, compuesta por una veintena de personas, pudo saludar personalmente al papa Francisco y le hizo entrega de una muestra productos españoles, entre ellos aceite de oliva y varios embutidos.
