El Ayuntamiento de Aranda y Hermanos Chico Galindo han llegado a un acuerdo por el cual esta última mantendrá la gestión del matadero durante los próximos cinco meses. De este modo, la empresa concede un plazo definitivo al consistorio municipal para que desbloquee la licitación de la enajenación de las instalaciones y evita por el momento el despido de los 28 empleados.
Hermanos Chico Galindo que gestiona el municipal desde hace treinta años, se ha comprometido a mantener abierto el matadero hasta el 10 de agosto, y no durante el año que quería el Ayuntamiento, señalando que es la última prórroga que puede dar para que la entidad pública cumpla con la labor que le corresponde. Sus responsables han señalado que el plazo concedido no es casual, sino que es fruto de un completo análisis de la situación de la empresa, que debe hacer frente a muchos problemas derivados de la actual situación transitoria, con la que convive desde hace dos años, que impide la elaboración de planes e inversiones a medio y largo plazo con los consiguientes perjuicios para la gestión y el futuro de la compañía.